Si eres un amante del café, es probable que hayas escuchado sobre el café de especialidad en algún momento. Pero, ¿qué lo hace tan especial?
Comencemos desde el principio. Anteriormente, estos granos eran conocidos como “cafés rotos” debido a su complejidad y su producción limitada. Sin embargo, fue en 1974 cuando una mujer llamada Erna Knutsen, en una entrevista, le otorgó el nombre de “café de especialidad” Knutsen se dio cuenta de que estos “lotes rotos” no eran deseados por las empresas debido a su escasa cantidad, pero poseían sabores únicos que valian la pena explorar.
Características del café de especialidad. El café de especialidad consiste en granos cuidadosamente seleccionados, desde su cultivo hasta su preparación. Para ser considerado como tal, debe obtener una puntuación de 80 puntos o más en una escala de 100, según los parámetros establecidos por la Asociación Especial del Café (SCA). Variedades de café existen variedad de plantas siendo las principales la robusta y la arábica.
- Robusta: Esta planta, originaria del Congo, produce más frutos en bajas altitudes y en climas más cálidos. Es resistente a enfermedades y plagas, pero su sabor no es tan apreciado como el de la arábica. Por lo tanto, suele ser utilizada mayormente en cafeterías comerciales
- Arábica: Es originaria de Etiopía considerada de mayor calidad, la arábica es una variedad apreciada por su sabor único y complejo. Se cultiva en diversas regiones y ofrece una amplia gama de sabores, desde notas afrutadas hasta chocolateadas.
Tipos de café de especialidad
- Origen Único: Estos cafés provienen de una única región o finca, permitiendo resaltar las características únicas del clima y las técnicas de cultivo. Esto resulta en perfiles de sabor distintivos y reconocibles. Los amantes del café pueden disfrutar de la singularidad de cada origen, desde los cafés afrutados y florales de Etiopía hasta los robustos con notas de chocolate de Colombia.
- Blend: Los blends son combinaciones de varios cafés, seleccionados y mezclados cuidadosamente por los tostadores para lograr un sabor equilibrado y complejo. Los tostadores pueden combinar cafés de distintas regiones o variedades para crear perfiles de sabor únicos y consistentes. Esta práctica les permite experimentar con una variedad de sabores y crear mezclas que satisfagan los gustos de un amplio espectro de consumidores. Los blends pueden ser diseñados para destacar notas específicas, como una acidez brillante o un cuerpo suave, y son una opción popular tanto en cafeterías como para el consumo en el hogar.